Bancolombia se fortalece en el manejo de pensiones

Los 150 millones de dólares de capital que aportará el Grupo Bancolombia a Inversiones Suramericana para la compra de los activos de ING, fortalecerán el negocio que la entidad financiera tiene en el campo de pensiones y cesantías.


Hoy, Bancolombia tiene una participación del 23,5 por ciento en Protección, la segunda compañía del mercado de pensiones en el país que, con base en la compra que hizo el Grupo Sura (la matriz de Protección), desbancará a Porvenir del primer lugar en el sector.

Carlos Raúl Yepes Jiménez, presidente de Bancolombia, aseguró ayer que la entidad decidió participar en este negocio ante las buenas perspectivas que tiene la operación, cuyo costo es superior a los 3.520 millones de dólares y que le permitirá a Sura completar los recursos faltantes que obtuvo en la emisión de acciones preferenciales, que llegó a los 3,5 billones de pesos, pero que no son suficientes para culminar la transacción.

Aunque la cifra no es muy alta, Yepes Jiménez consideró que el negocio de pensiones y cesantías sigue siendo estratégico para la organización y esta participación accionaria (aún pendiente por establecer) permitirá ampliar las inversiones en el mercado latinoamericano.

La IFC (Corporación Financiera Internacional- Banco Mundial (con 200 millones de dólares), el Grupo Bolívar (400 millones de dólares) y ahora Bancolombia (con 150 millones de dólares), serán los socios en esta operación que hizo Sura para quedarse con los activos de ING en América Latina, considerada una de las más altas de la región.

Ya está confirmado que otro grupo financiero del exterior aportará 300 millones de dólares, pero aún no termina el trámite que le permita a Sura dar conocer su razón social.

Otras entidades como el UBS AG, el mayor banco suizo, adquirió un paquete de 30 millones de acciones de Sura, por el cual pagará unos 506 millones de dólares.

"Creemos que es una apuesta muy grande por consolidar el negocio de pensiones en el país y la región. La cifra no significa un préstamo, son 150 millones de dólares de capital para hacer parte de la operación que consideramos estratégica para el banco, que ya tiene una participación importante en Protección", recalcó Yepes Jiménez.

El aporte de Bancolombia a este negocio coincide con el anuncio reciente sobre el crédito que por 100 millones de dólares le otorgó el Banco de Tokio-Mitsubishi, de Japón.

Los recursos los utilizará para apalancar sus operaciones de crédito.

Refinanciación de créditos
El presidente de Bancolombia aseguró que la entidad financiera está refinanciando créditos por 154 mil millones de pesos de clientes que se han visto afectados por las intensas lluvias del último año. Dijo que hay nuevas líneas de crédito para atender las emergencias, así como asesorías y acompañamiento a los damnificados, que en su mayoría han sido los establecimientos comerciales.

Pese a la intensidad de las recientes temporadas invernales, incluyendo la actual, la dinámica de créditos no se ha resentido. De hecho, resaltó que el sistema financiero tiene muy buena cobertura para la cartera vencida, que hoy está en el 2,5 por ciento cuando el año pasado por esta época estaba en el 3,8 por ciento.

"El banco no ha hecho ni una sola demanda por los clientes atrasados en sus pagos, tampoco lo haremos porque la situación es muy dramática. Todas las líneas de crédito se han afectado, pero especialmente la comercial y algo de la hipotecaria".

Reiteró que el banco mantiene el compromiso en apoyar a los colombianos en esta coyuntura. En esa línea, Yepes Jiménez se reunió ayer con el presidente Juan Manuel Santos para entregarle 2.932 millones de pesos que la entidad financiera recaudó para aportar a los programas de Colombia Humanitaria, que lidera la atención de los damnificados y la recuperación de las zonas afectadas.

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"Le estamos poniendo el alma": Yepes
El presidente de Bancolombia, Carlos Raúl Yepes, insistió ayer en que el sistema financiero colombiano tiene que cambiar para que sea más humano y en el que el cliente sea lo más importante. Mencionó que miles de personas no bancarizadas acuden al pagadiario ante las restricciones de acceso en la banca formal. "Estamos en un proceso de transformación. Por ejemplo, nos parece que la tasa de usura debería cambiar de nombre por la de mayor riesgo. Tenemos que ser más cercanos a las personas y lanzamos un nuevo lenguaje, de que le estamos poniendo el alma a todo lo que hacemos y esperamos que esto se replique en todo el sistema financiero".