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Espectativas del Tratado de Libre Comercio con Europa
Pasaron casi seis años para que el acuerdo de libre comercio con la Unión Europea se convirtiera en una realidad.
Y ahora, al acordar que el tratado entrará en vigencia de forma provisional dentro de ocho días (el 1 de agosto), los empresarios reciben otro campanazo sobre el gran trabajo que viene por delante para lograr un efectivo aprovechamiento.
No solo porque se trata de un mercado con más de 500 millones de consumidores y es el mayor importador del mundo, sino porque la presencia colombiana allá aún es escasa.
Datos de Proexport señalan que en la negociación del acuerdo se incluyeron 9.745 productos (de los cuales el 97,2 por ciento tiene arancel cero) y actualmente Colombia exporta 1.469.
Así las cosas, una tarea prioritaria seguirá siendo el diseño de una oferta exportable que permita que más empresas puedan vender a los exigentes consumidores del Viejo Continente.
Aquí ya hay una pauta. Un estudio realizado por Proexport señala que hay al menos 818 productos que actualmente tienen oportunidades.
La lista incluye productos agrícolas como las frutas y hortalizas frescas, también alimentos procesados como endulzantes, confitería, snacks, licores, cafés especiales y productos de panadería, entre otros.
Cálculos del Gobierno han señalado que este acuerdo le aportaría 0,46 puntos al crecimiento de la economía colombiana.
Además, productos que el país tradicionalmente ha exportado, como los textiles y las confecciones, seguirán encontrando opciones en ese mercado, pero con la ventaja de la disminución en los aranceles. Los artículos de cuidado personal y los cosméticos también son apetecidos por consumidores en ese mercado.
Hay quienes consideran que la experiencia que se ha vivido en el acuerdo con Estados Unidos es un buen punto de referencia para saber en dónde están las falencias y así tomar correctivos. Por ejemplo, uno de los asuntos que se destaca en la labor de aprovechamiento del TLC con EE. UU. es la división de las estrategias en transversales (eliminación de trabas al comercio), identificación de problemas en cada sector, y el potencial de las regiones.
EL CAMINO RECORRIDO POR OTROS
En América Latina, Chile y México completan varios años con un acuerdo con la Unión Europea.
Antes de Colombia, otros países pusieron en marcha acuerdos comerciales con la Unión Europea.
En América Latina, el que lleva más tiempo de experiencia es Chile, pues su tratado entró en vigencia en el 2003 y, durante este tiempo, sus ventas a Europa han crecido en promedio un 12 por ciento anual.
Aunque es importante esta dinámica, lo cierto es que las ventas están altamente concentradas en el cobre y sus productos.
En el caso de México, multiplicó por cuatro sus ventas a los países europeos en lo que va del acuerdo.
Israel, Argelia, Sudáfrica y Marruecos han adelantado procesos similares con el bloque.
Por lo pronto, algunos países centroamericanos también están negociando con la Unión Europea, y un capítulo aparte merece el proceso que actualmente adelanta la UE con Estados Unidos.